sábado, abril 11, 2015

La Casa del Duende

Este fue mi siguiente proyecto en lo que a miniaturas se refiere. La casa de un Duende! Y esta vez, más miniatura que la Casa de Pippa!

Le he sacado unas 40 fotos. Estoy muy complicada porque sé que no las puedo poner todas... (Aunque pueden verlas en su propio album en Flickr). Voy a tratar de hacer una selección: de cómo empezó todo y de cómo terminó. Espero que les gusten.

Primero, la base: es una calabaza seca, de la que por estos parajes llamamos matera, o de mate, porque sirve (desde tiempos inmemoriales) para hacer mates... Ya saben, la bebida de yerba que se toma con bombilla... En fin, conseguí en una casa que vende articulos para artesanías una linda calabaza teñida de una lindísimo verde. Perrrrfecta para ser la casa de un duende!

No mide más de 16 cm de alto. Por lo tanto se imaginarán que todo lo que va a ir adentro va a ser bien chiquito.

Como es alta, la idea era hacerle una buhardilla de dormitorio, y la planta baja todo lo demás. Quería ponerle una escalera (que en la casa de Pippa no pude poner) y un hogar con chimenea. Todo bien rústico y campestre.

También quería probar muchas técnicas que estuve viendo en Internet en estos últimos días (desde que me sumergí en el inmenso mundo de las casa de muñecas). Hay tanto para probar y hacer..!

Lo primero fue cortarle la pared del frente para que pudiese abrirse. Luego, le iba a pegar una bisagrita. Tambien le recorté una puertita y dos ventanitas. Las formas de las aberturas son bien orgánicas y con un gustito Art-Nuveau, estilo que les queda muy bien a los duendes y hadas.

Lo siguiente fue cubrir las paredes internas con papel maché (son muy porosas e irregulares). Usé cola adhesiva y agua, y papel tisú (rollo de cocina). Luego, cuando se secó, le puse otra capa con tiras de papel común, para darle algo de prolijidad.

La base de la calabaza era redonda, así que la rellené con masilla (dandole además un poco de peso, para que no se gire), y encima coloqué el piso "de parquet", tirillas de madera que corté y pegué sobre un cartón que previamente había armado, con la forma interna de la calabaza.

Del mismo modo hice el piso de la buhardilla, con un hueco para la escalera. Para darle más resistencia y dureza, le puse varias capas de papel maché. Luego lo coloqué, lo pegué y a los bordes les puse masilla epoxi para artesanos. Esto le agregó dureza, resistencia y de paso, lo emprolijó.

El color se lo dí con barniz brillante para acrílico, con una gotita de acrílico disuelto, de color siena tostada. El mismo color lo usé para el resto de las cosas "de madera".

El hogar tiene como base un recorte de un cartón de huevos. No sé si se darán cuenta de qué parte... Una vez más, le puse una capa de papel maché, sobre cinta de pintor. Las piedras son pequeñas bolitas de masilla, aplastadas contra el cartón con un pincel muy viejo y seco que tengo por ahi guardado. Quedó bastante creíble.

El duendecito está hecho con una base de alambres limpiapipas y una bolita de madera. Mi amiga Claudia me pasó gentilmente la direccion del tutorial para hacer muñequitos de esta manera. El mio, obviamente, es más chiquito: de alto mide 4,5cm. La túnica es de fieltro / paño lenci, igual que en el tutorial. El pantalón lo hice tejido (gasp!) con agujas 2,5mm doble punta: la técnica se llama I-cord. 5pts de ancho, creo que 5 o 6 hileras de alto.

El gorro tambien esta hecho con las mismas agujas, y lana finita. No me pidan patrón: empecé por la punta y fui aumentando hasta que llegué al diámetro de la cabeza del duende. Pies y manos son perlitas de madera. Podría haberlas hecho con masilla, pero ya era demasiado...

Hay muchas cosas en esta casa que moldeé con masilla epoxi. Como dije antes, estoy acostumbrada a usarla, seca bien y sola, queda dura, no se rompe, y es muy útil para hacer de todo. La puerta de adentro está hecha con masilla, la mesada (sobre cartón), la silla (con unos alambres de aluminio color cobre).

La olla, la bacinilla, y cuenco tienen base de bellota (ya los usé antes en la casa de Pippa). La olla "de hierro", son dos partes de bellota unidas con masilla. La bacinilla tiene el borde de masilla.

Con lo mismo hice las cucharas, cuchillo, sartén y demás adornos. Además de los techitos de ventanas y puerta. Tambien con masilla emprolijé los bordes de las aberturas.

La escalera está hecha con palillos de brochet. E hilo de coser.

Perlas de madera, palillos escarbadientes, trozos de alambre me sirvieron para hacer todo el resto. La taza está hecha de papel con pegamento: una tira enrollada en la parte de atrás de un pincel.

Luego, obviamente, todo está pintado y barnizado con acrílicos, Algunos detalles se los dibujé con marcadores Sharpie (en especial, los dibujos de la "cerámica": bacinilla, cuenco, taza).

Incluso está pintado el "fuego" adentro de la chimenea (donde puede entrar la olla, para que el dueño de casa se puede calentar la comida).

En la buhardilla sólo entraba el colchón, asi que no le pude hacer una cama. Le hice una colcha colorida, para compensar. Tambien le instalé un espejito y un peine, colgado de la pared. En este momento estoy pensando en ponerle un par de cuadros o fotografías... el tamaño será el de una uña, por eso todavia no me decidí a qué poner y cómo.

No podía faltar el sillón y la alfombra de crochet: está hecha con hilo de brodar y mi aguja más finita, la que uso para ensartar mostacillas (o sea, el gancho entra dentro del agujero de una mostacilla, así de finita es).

El sillon y el colchon son de goma eva, al igual que los de Pippa. La tela está pegada, no cosida, porque es realmente mucho más fácil... y no queda mal.

No me quedó precioso? Es adorable, no me digan que no...

Pueden ver más fotos en Flickr.